Historia del ícono de la Virgen del Perpetuo Socorro

La Virgen del Perpetuo Socorro es una de las advocaciones marianas más difundidas del mundo. Su fama se debe, en gran parte, al ícono milagroso que representa a María sosteniendo tiernamente al Niño Jesús, rodeada por ángeles que le presentan los instrumentos de la Pasión.
Este cuadro es de origen bizantino, probablemente pintado en la isla de Creta alrededor del año 1000. Durante siglos fue venerado bajo el nombre de Cardiótissa, expresión griega que significa “la que tiene corazón”, por el afecto que despierta su imagen.
El viaje del ícono hasta Roma
Según la tradición, el ícono fue robado y llevado clandestinamente a Italia, posiblemente debido a las joyas que lo adornaban. Aparece en Roma hacia el siglo XV, llevado por un comerciante. En 1499, es colocado en la iglesia de San Mateo, donde fue venerado durante 300 años.
Con la llegada de la Revolución Francesa y los conflictos que afectaron a la ciudad, el templo fue destruido y el cuadro desapareció. Por décadas, se perdió su rastro hasta que, en 1866, fue recuperado y confiado por el Papa Pío IX a la congregación de los Padres Redentoristas.
Desde entonces, fue colocado en un nuevo altar en la iglesia de San Alfonso, construida cerca de donde había estado el templo original. La coronación oficial del ícono tuvo lugar un año después, en una gran celebración religiosa.
Devoción mundial
Desde Roma, la devoción a la Virgen del Perpetuo Socorro se extendió a todo el mundo gracias a la misión de los Redentoristas. En muchos países se instituyó la “novena perpetua” de los miércoles, tradición que aún continúa con gran fervor.
Algunos ejemplos de esta devoción son impresionantes:
- Brasil (Curitiba): más de 10.000 personas por miércoles
- Singapur: 20.000 fieles
- Filipinas (Manila): 40.000 fieles
En Haití, la Virgen del Perpetuo Socorro fue proclamada Patrona Nacional.
Un mensaje de consuelo
El mensaje del ícono es claro: María no solo lleva a Jesús, sino que lo presenta a nosotros como Madre del Consuelo. Sus ojos miran dulcemente al fiel que se pone bajo su amparo. Por eso, muchos la llaman “la Virgen de las urgencias”, porque acude con rapidez a socorrer a quienes confían en su intercesión.
Devoción recomendada
Virgen del Perpetuo Socorro, ruega por nosotros.