Vida de San Peregrino

Vida de San Peregrino

San Peregrino Laziosi es conocido en todo el mundo como el santo patrono de los enfermos de cáncer, HIV/Sida y otras enfermedades graves. Su vida, marcada por la conversión, la penitencia y un milagro de sanación, lo convirtió en ejemplo de fe, humildad y entrega total a Dios.

Juventud y Conversión

Peregrino nació en Forlì, Italia, en el año 1260. En su juventud, fue parte de un movimiento político que se oponía al Papa. Durante un conflicto en su ciudad, golpeó en público a San Felipe Benizi, superior de la Orden de los Servitas. Pero en vez de responder con violencia, San Felipe le ofreció la otra mejilla. Este gesto de humildad tocó profundamente el corazón de Peregrino.

Movido por ese ejemplo, Peregrino se convirtió sinceramente al catolicismo. Se unió a la Orden de los Servitas, fue ordenado sacerdote y dedicó su vida a ayudar a los enfermos y a los pobres.

Vida de penitencia y entrega

San Peregrino fue conocido por su estricta penitencia. Como sacrificio, se impuso no sentarse durante más de 30 años, lo que le provocó problemas graves de circulación y salud. Con el tiempo, desarrolló venas varicosas y cáncer en un pie.

Los médicos decidieron que lo único posible era amputarle la pierna. La noche anterior a la operación, Peregrino pasó largas horas orando ante una imagen de Jesús Crucificado. Entonces ocurrió el milagro.

El milagro de la curación

Mientras dormía, tuvo una visión en la que Jesús bajó de la cruz y tocó su pierna enferma. Al despertar, su pie estaba completamente curado. Los médicos comprobaron que ya no había rastro de cáncer ni de llagas. No fue necesario amputarle la pierna.

Este milagro se hizo conocido rápidamente y San Peregrino vivió 20 años más, predicando y confesando. Fue un hombre profundamente amado por su pueblo, y considerado un ejemplo de humildad, caridad y perseverancia.

Muerte y canonización

San Peregrino murió en el año 1345, a los 85 años. Fue canonizado en 1726 por el Papa Benedicto XIII. Hoy su devoción está extendida por todo el mundo y es especialmente invocado por quienes luchan contra enfermedades incurables.

Patrono de los enfermos

Millones de personas recurren a él en momentos de sufrimiento físico o emocional. Es un símbolo de esperanza, de fe inquebrantable y de sanación.

Reza su oración milagrosa

¿Quieres pedirle su intercesión? Puedes hacerlo rezando la oración a San Peregrino aquí.